(se fue)

Y les seguí el consejo


La semana pasada trajo tremendo cocktail de emociones, desde sorpresas, proposiciones y encuentros gratos pasando por otros que, bueno... Todavía no estoy segura y sigo digiriendo para ver cómo es que se hace para bajarlos por la garganta hasta unos que verdaderamente terminaron por desequilibrarme poniéndome cual nube gris andariega.

Y es que es cosa trabajosa estar en un país como extranjera y tener el interés de desarrollarse profesionalmente en este nuevo hogar. Pone un tic-tac ahí en el fondo de la mente que le recuerda a una que no depende de cuánto se preocupe por la comunidad en la que vive ni tampoco importa si las demás personas le aprecian y valoran por sus esfuerzos diarios y su interés, al final quienes toman la decisión dizque objetiva de permitirle o no prolongar la estancia (objetiva sería no analizar cuantitativamente sino cualitativamente en función de lo que uno aporta o tiene el potencial para aportar).

Más difícil se vuelve cuando al tic-tac le añado mi interés y esfuerzo por levantar esta empresa social enfocada para disminuir el desempleo en las(os) jóvenes dentro de una organización que, si bien cuento con un respaldo y apoyo bastante sólido existen actores en este juego que hacen la tarea algo complicada que me termina dejando frustrada y queriendo escapar... Salir y no parar hasta que las piernas dejen de gritarme...

Si a estas preocupaciones menos mundanas le añado otras que lo son demasiado, relacionadas a la logística humana del romanticismo ¡puik! Tempura heart asegurado pues... Creo que puedo resumir diciendo que llevo un torbellino con diferentes frentes dentro y cuando ese torbellino se agita más de lo normal empiezan los flickitys nerviosos.
Afortunadamente he aprendido a esconderme en un refugio al que llego respirando (un poco más consciente del acto) y cerrando los ojos. El refugio que me da fuerza al recordarme por qué considero valioso tratar constantemente de vivir acorde a los valores en los que creo como la justicia, amor, esperanza, solidaridad, empatía, sensibilidad, respeto, honestidad, tolerancia lealtad, desprendimiento y el perdón.

Principalmente creo en esos valores y trato, aunque a veces falle en el ejercicio, de vivirlos porque creo en que podemos vivir en una mejor sociedad y constituir un mundo más equitativo y justo empezando por cada cual; porque deseo que mi sobrina y todas las personas a quienes amo miren su entorno con una mirada comprensiva, que encuentren amor y lo maravilloso que existe en la vida a pesar de que puedan estar viviendo situaciones no tan optimistas... En pocas palabras porque me desmoronaría sí sus respectivas 'chispas' dejaran de brillar y contagiar a los demás así que cuido mantener la mía activa porque pienso que es una forma de darles seguridad de que se puede vivir diferente, que no es muy sencillo desprenderse de las penas ni dejar la tendencia de intentar cargárselas a las demás personas porque cuando se aprende a hacerlo la deja a una más ligera para volar.

Así que cuando necesito recargar pila o cuando necesito despejar la mente de tanto bzz-bzz cojo el bulto viajero y emprendo camino. El lunes tenía en mente cómo visualizar el proyecto desde un ángulo que le conceda buena cara ante las fundaciones pero sobre todo estaba pensando en que necesito reestructurar el plan de acción porque wonder woman todavía no soy y no puedo estar derrochando energía para todas direcciones. Una cosa a la vez, querida y la cosa que tenemos es el programa para televisión a lanzar en un mes así que aproveché la excusa de que tenía el repollo chino del sábado más el lo-mein de hace un mes (cof cof) y decidí dirigirme a la tradicional tienda de los chinos para comprar la salsa Hoisin que pedía una receta de Rachael Ray que me encontré y se apreciaba respetable (porque el lo-mein se respeta :p).

Y esta fue la ruta (chan chan chaaan)

Santurce/Condado + paradas curiosas (olvidé señalar Ofi-Arte justo entre la uni y la cafe)

El recorrido resultó fantástico y me llenó de buena vibra porque conocí mujeres fabulosas a cargo de negocios con quienes se me ocurren que podemos hacer par de cosas. Básicamente esta ruta tiene lugares buenísimos para sentarse y tomarse una bebida refrescante o café en ambientes agradables y sin tanto bullicio.

El buen ánimo comenzó con Ofi-Arte porque conseguí una libreta colombiana de lo más coqueta hecha de papel reciclado y corcho por 3dls (yeah yeah) más el regalo de cumpleaños del Yeti que, por cierto, ¡me quedó bastante similar a lo que tenía en mente! jeje es que luego me sale cada cosa... ¬¬

me encanta que está así todo cubierto :3

Este edificio me hace pensar en 'Las Nuevas Aventuras de SuperMan' O_O

Empecemos por el primer spot en el mapa que me viene perfecto porque ya se dónde comer cuando salga volada de casa sin municiones para sobrevivir el día: VEGGIE FRUTY JUICE BAR!!! (1558 Ave. Ponce de León y quien está ahí es la encantadora Nora). Lo pongo con mayúsculas y muchos signos de exclamación porque está a unos 15 min caminando de la uni ^__^ así que está de show.

El espacio es acogedor, tranquilo y por lo que me dijeron las vecinas sentadas junto a mi también es bastante sabroso. La barra realmente no lleva mucho en Santurce a penas unos nueve meses y por lo que Nora me contaba entre sus ires y venires detrás de la barra preparando sandwiches y smoothies, consideran que para el tiempo que llevan les va bastante bien y enhorabuena porque por lo que pude apreciar son congruentes con su misión de ofrecer alimentos nutritivos y saludables ¿por qué lo digo? Porque buena parte de sus ingredientes son productos orgánicos o cultivados en Puerto Rico.
Tenía ganas de algo refrescante y las nieves estaban bastante tentadoras pero como quería seguir explorando el área sin salir toda embarrada como suelo quedar porque me tardo en comerlos y la temperatura del Caribe no ayuda a mi causa así que pedí agua de limón con jengibre y néctar de agave para endulzar, mmm!! Me trasladó a los años en que mi hermana nos preparaba palomitas con chile y la jarra de agua que preparaba con todo y las cáscaras pero que le quedaba, extrañamente, sabrosa (eso sí, yo la hacía y me salía amarga y eww, ay no).





¬¬



Hasta que le tomé una foto después de pasar tantas veces por ahí

Seguí hasta llegar a la Avenida de Diego para virar y de una vez aprovechar para echarle un vistazo a la librería Cronopios que desde que se mudaron del Viejo San Juan no la había vuelto a visitar y de paso matar la curiosidad del Calzonudo que me preguntaba por la tienda pero que igual no sabía que se había mudado y por eso no la encontró nunca en el VSJ jiji.











Después de perderme un rato, llegar hasta una calle cerrada y tener que regresar hasta la intersección con las avenidas principales me di cuenta que aquí tenían el póster de la peli Ámerica en la puerta, ¡eso ej!! Apoyo al cine puertorriqueño, ¡woohoo! (siii, bueno me sacó unas lagrimitas principalmente en una escena entre las actrices Yareli Arizmendi y Lymari Nadal en donde María (interpretado por Yareli) mientras está doblando ropa (uno de sus múltiples trabajos en NY para poder alcanzar un ahorro suficiente que le permita traerse a los States a su hijo de México a quien no ve por varios años) pues se achicopala porque es el cumpleaños del muchacho y no consiguió comunicarse con él entonces Ámerica, con su generosidad y cariño hacia los demás que la caracteriza, le propone cantarle las mañanitas bien duro para que las escuche hasta allá... Es tan bella la escena (ahora mismo la estoy evocando y mis ojos andan dando señas sensibles) pero además de bella pues es fácil de identificarse con ella cualquiera que tenga seres amados a miles de kilómetros. Si bien existen medios que permiten comunicarnos mejor lo que hace gulp es pensarse en los zapatos de los personajes...




Otro gulp encontrarse con estas cosas, tsk... Me pregunto si las personas a cargo del negocio de al lado (el que vende flores) no piensan que quizás no sea favorable para su imagen sendo cochinero de terreno que me imagino les pertenece porque ese camioncito no llego volando...

pretty landscape, huh? >:|



Después de la perdida y más de la roña por tanta basura dejada a la suerte de vaya uno a saber quien, en la esquina a la derecha: LA TIENDA de los orientales y sin ningún problema encontré Hoisin Sauce :)



sala de operaciones

¡TADA!


Quedó bastante sabroso, la salsa picante no la compré pero hice mi propia versión con chiles cascabel, ajo y cebolla que combinada con la salsa que compré quedó yum yum.

Por cierto, ya en el coche camino a casa estaba escuchando Agenda de Hoy... Esa vez entrevistaba a dos representantes de ProFamilia quienes trabajan bastante con el tema de la educación sexual y tienen una tienda en donde (sí, también me enteré, venden condones femeninos, ujú!) pero el shock más fuerte fue que hasta ese día me vine a enterar que el aborto no es ilegal en Puerto Rico y que esta organización los realiza (juro que pensaba que era ilegal).


^__^ un separador personalizado