«La sociedad nos condiciona, claro, pero la convivencia nos ayuda a desarrollarnos mutuamente como humanos. De ahí la importancia de la educación y del trato personal Todo puede condicionarte como individuo, y contribuir a convertirte en alguien que, te guste o no, no esperabas ser. Forma parte de la vulnerabilidad del ser humano. Por eso, todos tenemos que tener miramientos con los demás, para intentar desarrollar lo mejor de los otros, y que ellos, a cambio, nos ayuden a ser mejores. Ese condicionamiento existe ahora y ha existido siempre en las sociedades, de hecho, es la razón principal por la que vivimos en grupos amplios.


La imitación es esencial para todos los seres sociales, es fundamental para aprender. Todos los seres que viven en sociedades organizadas, viven imitándose unos a otros, es la única manera de que una sociedad se sostenga. Si cada ser fuera totalmente original, no podríamos vivir en sociedad porque no seríamos receptivos a los demás ni ellos a nosotros.

Cuando somos pequeños (pero también de mayores aprendemos a vivir observando cómo viven los demás. Los demás siempre nos inspiran. De ahí la importancia que tiene en la educación el contacto con el profesor. No basta con que te den toda la información que necesitas con un ordenador. La convivencia con maestros vivos, de carne y hueso, y con su personalidad, pese a todas las limitaciones, es imprescindible, porque uno se prepara para vivir investigando a personas que están más avanzadas en ese empeño.»

fragmento de fernando savater en el libro
ética de urgencia” para editorial ariel (septiembre, 2012)


[nota]

si bien cuando uno lee -leyendo con la concentración bien puesta en lo que se nos cuenta-, es dejarse seducir por las ideas, lugares, emociones y todo el universo de posibilidades que guardan los libros... los ensayos de fernado savater me caen como el agua al pez; es como tenerlo frente a mi y que éste estuviese montando esta conversación sobre ética y educación en donde yo sigo moviéndome por ese caudal. y sí, escogí el concepto de 'conversar' porque llegan momentos de introspección y de análisis social en que sopeso con lo que el buen savater propone (y pienso que piensa, claro) para encontrar mis posturas... produciéndose en mi la sensación rica que produce descubrirse aprendiendo y dejándose transformar en ese proceso que implica ser humano (ser ese potencial de humanidad).