[LARALALÁ-MARK]: sigo sacando espinas... clave exacta de este tejido + álbum preferido en mi fin de semana



Cada día sigo sacando espinas

De lo profundo del corazón
En la noche sigo encendiendo sueños

Para limpiar con el humo sagrado cada recuerdo
(...)
Pienso que cada instante sobrevivido al caminar
Y cada segundo de incertidumbre
Cada momento de no saber
Son la clave exacta de este tejido
Que ando cargando bajo la piel
Así te protejo
Aquí sigues dentro


sospecho que a muchas nos pasa que comenzamos a divertirnos con 


las ocurrencias cotidianas que sazonan las maravillas que de por 



sí ofrece la vida porque comienza a tener sentido... (no que 


CONOZCAMOS qué... pero lo sentimos). reconocemos que algo surge 


dentro que es distinto... que nace.  




Es la vida en cursiva para enfatizar entre lo 


ajetreado que puede ser la cotidianidad que llega a abrumar lo 

ASOMBROSO que resulta que la tierra giré en donde lo hace y no 

en dos órbitas más lejos del sol... que nuestro cuerpo sea prueba

-plenamente- andante de materia cósmica... y ¡jurásica! uff...


o como más bonito compartiera oliverio girondo:



Cuando se tienen los nervios bien templados, el espectáculo más insignificante —una mujer que se detiene, un perro que husmea una pared— resulta algo tan inefable... es tal el cúmulo de coincidencias, de circunstancias que se requieren —por ejemplo— para que dos moscas aterricen y se reproduzcan sobre una calva, que se necesita una impermeabilidad de cocodrilo para no sufrir, al comprobarlo, un verdadero síncope de admiración.

De ahí ese amor, esa gratitud enorme que siento por la vida, esas ganas de lamerla constantemente, esos ímpetus de prosternación ante cualquier cosa... ante las estatuas ecuestres, ante los tachos de basura...

De ahí ese optimismo de pelota de goma que me hace reír, a carcajadas, del esqueleto de las bicicletas, de los ataques al hígado de los limones; esa alegría que me incita a rebotar en todas las fachadas, en todas las ideas, a salir corriendo —desnudo!— por los alrededores para hacerles cosquillas a los gasómetros... a los cementerios....


este fin de semana me he topado con el último álbum de natalia 


lafourcade (la mismita de voz de infancia congelada y con un 

vídeo musical en donde sale usando un traje de pato, sí ella). 


¡qué sorpresa! de pronto encontré ese regalo de lo maravilloso de

la realidad donde acurrucarme cuando el dragón temeroso se anima 

a aparecer para expresar el mal gusto que tengo para ponernos en 

situaciones de las que pudiéramos arrepentirnos. incluso, a modo 

de presentar mejor su caso, se dispone a ejemplificar cómo pude haber actuado.



el más reciente de sus intervenciones nerviosas resultó novedoso.

me ha dicho:


 "¿viste que pudiste haberle pedido ayuda?" 
(... silencio...)
"... no pudiste identificar que cuando te abrazó, y tú estabas comenzando a irte, pudiste haberle pedido que te ayudara a que no te fueras. que te mantuviera ahí, con él, para que no te perdieras en tus pensamientos porque no querías que se convirtiera en un 'adiós' indeseado"


y pos qué decir... el dragón de vez en cuando articula atinadamente y esta vez tocó.

sin que me fallara mi fiel sensibilidad, me dio por llorar. 
llorar con el sentimiento de cuando reconocía que perdía definitivamente alguno de mis cassettes de bandas sonoras de disney por quererlos llevar conmigo a todos lados (aún cuando, por ejemplo, el dentista dijera "lo siento, nena... sólo tengo un radio, nada de reproductor portátil" cada vez que le visitábamos). 
o cuando recordé que había salido de la parisina dejando a mi hermoso peluche san bernardo, ¡con su barril de emergencia!,entre paquetes variados de telas que me encantaba tocar para sentir sus texturas en lo que mamá seleccionaba la tela para alguno de sus diseños que la modista confeccionaba... la desilusión de encontrarme con que alguien más había apreciado que mi san bernardo era la chulada hecha esponjosa. (mierda... sólo fueron 5min que nos tomó llegar a la salida, esperar al cambio de luz para cruzar la calle y regresar corriendo mientras alcanzaba a gritarle a mamá ¡mi san bernardo! ¡mi san bernardo!).

entonces recordé ese pedacito de la canción hasta la raíz (primer track con que abre la puerta al remolino emocional de la lafourcade que es su álbum... y también mío, maravilla de la vida).

Cada momento de no saberSon la clave exacta de este tejidoQue ando cargando bajo la pielAsí te protejoAquí sigues dentro

y me dio por ceder a colocarle (sí, a él) en ese lugar de interpretarlo y definirlo en mi recuerdo con esa -casi- amenaza de llevarlo dentro... protegido hasta la raíz.

entonces sucedió algo que volvió a ser una sorpresa. la abuela sabia que me habita, entró en la conversa sin violencia... sin gran aspaviento (no como hada madrina ni como esas manifestaciones de la bruja que sabe). se manifestó haciéndome sentir que era una linda canción. que también le gustaba el ritmo porque le recordaba al estilo de grandes canta-autoras latinoamericanas, particularmente mercedes sosa y violeta parra. 


ya cuando se 'materializó' con voz clara, me invitó a escuchar la canción con un poco de mejor agudeza... 

"hay que proteger a la niña que somos y que ha aprendido algo importante del amor, de los deseos pero sobre todo de quien es... de lo que puede y de lo que no ha de creerse que no es capaz hasta intentarlo. 

proteger el ánimo curioso que la lleva, justamente, a experimentar y en cada experiencia, llenarse de una alegría que le hace rebotar por las fachadas ante las maravillas escondidas y con que las que la vida gusta de entretenernos."

 y sí... cada momento de no saber, son la clave exacta de este tejido que ando cargando. así te protejo... aquí sigues dentro. 

entonces me reí, me senté derecha -más segura de mi- y agradecí ese pedacito de sabiduría que me hizo interrumpir la avalancha que ese dragón inconsciente había desatado (sin intención, el pobre sólo tiene miedo...)





esta otra canción fue una ventana a reconocer que duele porque nunca es suficiente para mi... siempre quiero más de ti. por eso conviene más este tiempo sin nosotros... aunque de retortijones en la noche y haga un calor en la frente que no me deja dormir.  


Nunca es suficiente para mí
Porque siempre quiero más de ti
Yo quisiera hacerte más feliz
Hoy, mañana... siempre 










¿Para qué sufrir si no hace falta?

¿Para qué tirar nuestras cartas y fotografías?

¿Para qué olvidar que antes de todos nuestros besos
fuimos como hermanos, fuimos como amigos con derechos?

Nunca imaginé que me casaría sin papeles

Nunca supe cómo hacer que fueras más feliz, te lo juro.

Tenías que buscarte tú, tenía que salvarme yo.







O U C H. a veces se casa sin papeles, sí. duele comprender que la tarea de hacer más feliz a otra persona siempre va a traer confusión y revolución a una porque... ¿quién puede decirnos qué hará más feliz a alguien? y porque por ahí no es la cosa. amor dependiente oculta miedos personales que en un futuro se convertirá en algo feo entre ambos. 
entre esas maravillas que la vida saca de vez en cuando porque sabe que es delicioso divertirse, encontrarás y entenderás que, en poquísimas veces, no es complejo comprender cuando hay que dar un abrazo, decir "quédate", "lo siento" y demás. porque el deseo mutuo por estar juntos es AMOR. que no siempre se es correspondido, es cierto, pero aquí viene otro ¡ah! lo más importante es que sospecho que no se decide a quien amar... pero si tu amor, por este amor no correspondido, no tiene un peso grande en lo que define qué tanto disfrutas de ti y de la vida y, además tienes la oportunidad de sentirte dichosa por otras fuentes (salidas cognitivas) como tu trabajo, tu habilidad para hornear, algún hobby... lo que sea que alimenta tu identidad, entonces vas a tener las herramientas para que no te tumbe cuando te encuentres triste y pienses que no eres valorada. sí lo eres, sólo que tus circunstancias las sientes desafortunadas. para evitarlo, procura tener una canasta variada de lo que te define :-)








y acerca de definiciones... de responsabilizarse de una y reconocer que crecer, ser adulto, duele...
jamás había usado exitosamente listas de lo que quiero hacer y hace un momento noté que pudiera estar aprendiendo a usarlas. a mi modo de organizar mis pensamientos, claro. no hay hora. hay un orden por prioridades pero comenzó con anotar TODO lo que deseaba realizar en estos 3 días.

también se siente bonito la seguridad que una construye para si misma sea salir a correr en una rutina, leer, proyectos creativos, cuidar el hogar, tener tiempo para la esquincleada... lo que sea que requiera afirmar que si no hicieras esto en particular para ti... el estrés sería terrible... la vida sería abrumadora  (¡gracias alexandra kollontai y russell!)


[bookmark 04.02.15]: isabel allende... uff... de amores de vendaval

aquí todos te llaman la niña, debe ser por tu cara de colegiala y ese pelo largo que las enfermeras trenzan. le pidieron permiso a ernesto para cortártelo, es muy engorroso mantenerlo limpio y desenredado, pero aún no lo han hecho, les da lástima, lo consideran tu mejor atributo de belleza porque aún no han visto tus ojos abiertos. creo que están un poco enamoradas de tu marido, les conmueve tanto amor; lo ven inclinado sobre tu cama hablándote en susurros, como si pudieras oírlo, y quisieran ser amadas así. ernesto se quita el chaleco y te lo pasa por las manos inertes, toca, paula soy yo, dice, es el chaleco que prefieres ¿lo reconoces? ha grabado mensajes secretos y te los deja puestos con audífonos, para que escuches su voz cuando estás sola; lleva un algodón impregnado en su colonia y lo coloca bajo tu almohada, para que su olor te acompañe. a las mujeres de nuestra familia el amor les llega como un vendaval, así le pasó a mi madre con el tío ramón, a ti con ernesto, a mi con willie y supongo que les sucederá igual a las nietas y bisnietas que vendrán. un día de año nuevo, cuando ya estaba viviendo con willie en california, te llamé por teléfono para darte un abrazo a la distancia, comentar el año viejo y preguntarte cuál era tu deseo para ese 1988 que comenzaba. quiero un compañero, un amor como el que tú tienes ahora, me contestaste al punto. habían pasado apenas cuarenta y ocho horas cuando me devolviste la llamada eufórica.

 -¡ya lo tengo, mamá! ¡anoche conocí en una fiesta al hombre con quien me voy a casar!- y me contaste atropelladamente que desde el primer instante fue como una hoguera, se miraron, se reconocieron y tuvieron la certeza de ser el uno para el otro.
-no seas cursi, paula. ¿cómo puedes estar tan segura?
-porque me dieron náuseas y tuve que irme. por suerte él salió detrás de mi...

  una madre normal te hubiera advertido contra tales pasiones, pero yo no tengo autoridad moral para dar consejos de temperanza, de modo que siguió una de nuestras conversaciones típicas.

-formidable, paula. ¿vas a vivir con él?
-primero debo terminar mis estudios.
-¿piensas seguir estudiando?
-¡no puedo dejar todo tirado!
-bueno, si se trata del hombre de tu vida...
-calma, vieja, acabo de conocerlo.
-yo también acabo de conocer a willie y ya ves donde estoy. la vida es corta, hija.
-es más corta tu edad que a la mía. está bien, no haré el doctorado, pero al menos terminaré la maestría.

    y así fue. concluiste tus estudios con honores y después partiste a vivir con ernesto en madrid, donde los dos encontraron empleo, él como ingeniero electrónico y tú como psicóloga voluntaria en un colegio, y poco después se casaron. en el primer aniversario de matrimonio tú estabas en coma y tu marido te llevó de regalo un cuento de amor que te susurró al oído arrodillado junto a ti, mientras las enfermeras observaban conmovidas (...) 
leído en 'paula' escrito por isabel allende,
 la noche taciturna del 1ero de abril del 2015.
p.69


[NOTA]

no siempre es a causa de andar dando tumbos (vivirlos, es decir, sentirlos y padecerlos aunque no tenga moretones visibles) pasa que leo buscando un no sé qué para ayudarme a comprender aquellas no-se-qué-dades que me drenan. 
en estas semanas he tenido dos chispazos, que algo de clic hicieron porque ando menos planta y más persona. entre mastering the art of quitting the paradox of choice se colocó algo que sospecho que tiene que ver con la relación entre la 'felicidad' y la percepción de control sobre la vida de una. 

similar a marjane satrapi (persepolis), es el trancazo de la pérdida del amor el zopetón más grande y doloroso que me ha dejado con esta persona que no reconozco. a diferencia de titi marjane, he estado en este ciclo de "parecemos pero recuerda que NO lo somos" por 5 años... así que el duelo no se ha dado. simplemente mi esperanza -claro, junto a mi fuerza por reconocerle como el compañero con quien quiero seguir disfrutando y aprendiendo mi y la vida- me llevaron constantemente a reconocer que hay modos míos que pudieran mejorar nuestra 'no relación'. 
mi necesidad de nombrarla, por ejemplo, de conocer sus contornos para poder construir presente y futuro juntos, me lo reproché. muchas veces pensé que sería mi ego y por ello, era algo con lo que tenía que lidiar porque era una ilusión eso de necesitar nombrar. así, sucedió con muchas otras... cosillas... que consideré que eran cosas mías con las que tenía que lidiar. hoy me siento triste. sé que reprimir la chispa -esa que bailotea, brilla y contagia alegría- para no salir a encontrarle no es lo que quiero. lo que quiero es conversar con él. específicamente que sea él quien nombre si desea ser mi compañero y viceversa. quizá si tiene miedo de no poder llegar a hacerse ese alguien que querría ser. 

es muy curioso, esa vida en compañía -en mi realidad- tiene ciertas características pintorescas que vienen con cierto cataclismo debido a quienes se les ocurrió decir "ustedes extranjeros no pueden quedarse salvo si... y sólo si...". pero ¿qué no, si dos personas se aman y desean estar juntas... no debería ser esto un 'ya veremos cómo lo logramos' versus algo que defina que NO debe de arriesgarse todo porque 'terminaría'? (sea todo... aquel todo que cada cual pudiera definir).

me agotó dejarlo todo constantemente para apoyarle. nah, eso no me agotó... al contrario, no importaba si era despertarme a las 2am para prepararnos algo que nos diera fuerza para bajar del yunque o toro negro o donde sea que nos fuéramos a meter, parecía que estar cerca de él... sentir que algo bonito se iba formando, me daba energía de sobra. 
lo que me marchitó fue la negación en dosis impredecibles que me ponían en mi lugar borroso. ese de "te quiero por las noches cuando el día se va y con éste, otra oportunidad perdida para estar con la persona que me hace sentir lo que tú por mi". no hubo un cuidado de ninguno de los dos por curar el corte cuando pasó por vez primera y sí hubo varias punzadas más que me han dejado con esto que duele y no sé como aliviarlo.

no quiero continuar sintiendo que a lo mejor soy yo con mi problema lingüístico y carácter fuerte, menos quiero este sentimiento de ser la opción de "resuelve en lo que" pero definitivamente me duele que alguien más pase por lo que paso. 
de nuevo, si está (ironías geográficas) en otro país, si es que está comprometida o se canceló el compromiso, si tiene amistades con filosofías de vida que te desesperan, o cual sea lo que ponga una mueca... es una pequeñez (igual que mi término de 'compartir la vida' venga con fecha de expiración impresa en un papel tamaño carta). si dos personas sienten que quieren compartir su vida juntos... ¿por qué no? y yo aquí digo con permiso, déjenme les echo porras y continúo por otro camino. mis tristezas las he tenido que atender sola y para ello necesito ese otro andar. lo siento, tenemos que escoger.

esa chispita impregnada de esperanza me dice que estoy siendo orgullosa y que si le quiero como lo siento, que le quiera como es; con su ambivalencia, con su amor no correspondido, con esa terquedad a veces absurda. 
hmm, sabes... creo que estos 5 años han sido exactamente eso, chispita. comienzo a aprender que esto no funciona así, también eso se tiene que hablar/nombrar. alguien te lo tiene que pedir. no puedes llegar e instalarte en la vida de alguien sin que ese alguien te haya pedido que lo estés. (salvo elizabeth costello pero ambas sabemos que es un personaje ficticio en la obra de coetzee). a nosotras nadie nos ha dicho: 'quédate aquí, conmigo... con nosotros'.

me siento cabronamente helpless. [aquí entra lo del efecto de falta de control y en el bienestar personal] me siento como los pobres perros que, después de que les dejaron de aplicar los correntazos eléctricos, no podían dirigirse a la puerta de la jaula después de haber intentado los tres lados y haber obtenido esos estímulos negativos en cada intento aún cuando ya no estaban siendo estimulados. simplemente se sentían desamparados. así me siento.
tienes mucha energía chispita, por un lado quieres correr en búsqueda del amor que se nos puede estar muriendo por orgullosa y por otro me animas a recordarme que ya no hay corrientazos eléctricos. que es una percepción. que me levante y vaya hacia la puerta. que esta realidad geográfica-política está repleta de miedos y que no se puede perder algo que no se ha tenido así que no tenga miedo en defender y construir mi porvenir en donde sea que quiera, que además d., j. y la tribu estarán siempre allí. sobre todo d. para no preguntarte y cuidarte como siempre lo ha hecho. 
es como si apostaras a todo lo que pudiera levantarme. sabes que el amor es majestuoso y sospecho que por eso eres media sorda y bizca --- o quizá sea que te haces media sorda y bizca por ello. como sea, admiro tu tenacidad, chispita. basta de reproches de que él no tuvo miramientos... cuidado contigo como los sentiste que tuviste hacia él. esto es parte de lo maravilloso de vivir... se aprende a saber dejar fluir.

vamos a cuidarnos mejor, ¿te parece? te quiero mucho. gracias por acompañarme en estos años.

s. 

Etiquetas

¡viva vegan! the mexican style ... de mis recuerdos 1945 2013 2014 2015 2016 2018 a history of western philosophy alain badiou aleatorios Alexandra Kollontay amor amor y desamor andanza ángeles mastretta año nuevo baby peanut bbc Benedetti bertrand russell Bienvenida big little lions blogósfera Bookmark bookmark 2014 bookmark 2015 bookmark 2016 bookmark 2019 boredom canal22 carl sagan chef's table cinema clarissa pinkola estés conquest of happiness cotidiana cotidianas creatividad cuento despedidas doctor who doris lessing education elementary elena poniatwska elisabeth badinter ensayo essay ética everything will be ok exploraciones exploraciones: culinarias exploraciones: tv felicidad fernado savater fifi filosofía Francesca Gino gioconda belli goodreads hulu humanismo hyperiusrex ileana infusiones/té inglaterra izotope J. M. Coetzee julieta venegas julio krzystof kieslowski la chiwinha lalaralalá-mark leamos juntos literatura literatura infantil love & life maria montessori mark twain marta gómez maternidad matrimonio méxico michael burry michael onfray montessori toddler motherhood music música natalia lafourcade neil gaiman netflix nicaragua ozso película poema pozole Project on the run rayuela recetas ritmos para un domingo santurce SAPL Sasha Druyan Sagan ser humano sigmund freud simone davies sipiti-sipiti-sip sociedad spotify the beatles the big short the conflict: how overzealous motherhood undermines the status of women the graveyard book torbellinos personales trois couleurs trópico tv vegan vida vieques walt whitman women yeti zbingiew